Mini documental dedicado a la tradición de ir de tapas en determinadas partes de Andalucía, como ocurre en las provincias de Granada, Almería y Jaén.
Este primer episodio se centra en Jaén capital, a través de él podrás conocer algunos de los establecimientos más importantes de la ciudad como son La Barra, Bomborombillos o Cuatro esquinas.
Tradición, innovación gastronómica y las zonas más populares para saborear una parte de esta tierra.
Descubre la rica tradición de las tapas en Jaén, donde se sirven como cortesía con las bebidas y han evolucionado de simples opciones a platos sofisticados.
Orígenes de la tradición de las tapas
La cultura de las tapas es una parte integral de la gastronomía española y ha existido durante siglos. Si bien es difícil rastrear su origen exacto, existen varias teorías sobre cómo se desarrolló esta tradición única.
Posibles orígenes: Rey Alfonso X, Reyes Católicos y una historia de Cádiz
Una de las teorías más populares sobre el origen de las tapas se remonta al siglo XIII, durante el reinado del Rey Alfonso X de Castilla. Según la leyenda, el rey quedó gravemente enfermo, lo que afectó su apetito. Para recuperarse, se le recomendó tomar pequeñas porciones de comida junto con pequeñas cantidades de vino. Se dice que el rey ordenó que todas las tabernas sirvieran comida con las bebidas alcohólicas para estimular su apetito y ayudar a su recuperación. Esta práctica se extendió rápidamente por todo el reino y se convirtió en una tradición arraigada.
Otra teoría sugiere que los Reyes Católicos, Fernando e Isabel, también tuvieron un papel en el origen de las tapas. Durante su reinado, se acostumbraba a cubrir las copas de vino con tapas (literalmente, «tapaderas» en español) para evitar que se les colara polvo o insectos. Estas tapas de los vasos de vino generalmente se hacían de pan o queso. Con el tiempo, se comenzó a servir pequeñas porciones de comida en lugar de las tapas de pan o queso, lo que llevó al desarrollo de la tradición de las tapas tal como la conocemos hoy en día.
También se dice que la ciudad de Cádiz, en la costa suroeste de España, desempeñó un papel importante en el desarrollo de las tapas. Durante el siglo XVIII, los barcos que regresaban de América a menudo atracaban en Cádiz para abastecerse de alimentos y bebidas. Los marineros solían hacer pequeñas pausas en las tabernas del puerto para disfrutar de un vaso de vino acompañado de pequeñas porciones de comida. Esta práctica eventualmente se propagó por toda España y se convirtió en una tradición arraigada en el país.
Gesto de cortesía al servir con las bebidas
Además de los posibles orígenes históricos, las tapas también se convirtieron en un gesto de cortesía al servir bebidas en los bares y tabernas españolas. En España, cuando pides una bebida, es común que se te sirva una pequeña porción de comida de forma gratuita. Este gesto se considera una muestra de hospitalidad y una forma de agradecer a los clientes por su patronato.
Las tapas también tienen un propósito práctico al servir con bebidas. Al disfrutar de una bebida alcohólica, las tapas proporcionan algo de alimento para contrarrestar los efectos del alcohol y permiten a los clientes disfrutar de una experiencia gastronómica completa mientras socializan. Además, las tapas son una excelente manera de probar diferentes sabores y platos sin tener que comprometerse con una sola comida completa.
Bares tradicionales en el casco antiguo de Jaén
Descubre los bares tradicionales en el casco antiguo de Jaén, donde podrás disfrutar de auténtica comida local y experimentar la historia de la ciudad a través de sus establecimientos centenarios.
El bar La Barra, desde 1960 con raíces desde 1920
Si buscas sumergirte en la tradición gastronómica de Jaén, el bar La Barra es el lugar perfecto para hacerlo. Con más de 60 años de experiencia, este icónico establecimiento ha estado sirviendo auténtica comida y bebida desde 1960, pero sus raíces se remontan a 1920.
Al entrar en el bar La Barra, te transportarás a otra época. Su encanto rústico y su decoración tradicional te harán sentir como si estuvieras en el pasado. Podrás disfrutar de una carta variada que incluye platos típicos como tapas de aceitunas y queso, patatas bravas y migas. Además, también ofrecen una amplia selección de vinos locales y cervezas artesanales para acompañar tu comida.
La Barra se ha convertido en un punto de encuentro para locales y visitantes que buscan disfrutar de la auténtica cultura de Jaén. Es un lugar lleno de vida y animado, donde podrás compartir risas y conversaciones con los clientes habituales mientras te deleitas con los sabores tradicionales de la región.
El Gorrión, establecido en 1888, con deliciosos quesos y ambiente tradicional
Si eres amante del queso y buscas una experiencia gastronómica única, no puedes dejar de visitar El Gorrión. Este bar, establecido en 1888, es conocido en todo Jaén por su amplia selección de quesos y su ambiente tradicional.
El Gorrión es un lugar acogedor y lleno de historia. Al entrar, serás recibido por el aroma característico del queso y por una decoración que te recordará a una antigua quesería. Podrás deleitarte con una variedad de quesos locales, como el queso de cabra y el queso curado de oveja, acompañados de deliciosas mermeladas y pan casero.
Este bar ha sabido mantener su esencia a lo largo de los años y es un lugar muy querido por los habitantes de Jaén. Durante tu visita, podrás escuchar historias sobre la tradición quesera de la ciudad y aprender más sobre los diferentes tipos de quesos que se elaboran en la región.
Bomborombillos: una versión moderna de la cocina tradicional
En el corazón de la ciudad, se encuentra un lugar que ha revolucionado la escena gastronómica local. El Restaurante Bomborombillos es mucho más que un simple bar, es un templo de la cocina tradicional reinventada. Con un enfoque en la calidad y los productos locales, este establecimiento ha dejado una marca imborrable en los paladares de aquellos que se aventuran a probar sus delicias culinarias.
La taberna Cuatro Esquinas y sus famosas migas
En la pintoresca localidad de Cuatro Esquinas se encuentra un auténtico tesoro culinario: la taberna Cuatro Esquinas y sus famosas migas. Este plato tradicional se ha convertido en la especialidad de este acogedor establecimiento, donde los comensales pueden disfrutar de unas migas exquisitas y únicas en su género.
Migas tradicionales con sabores sorprendentes
Lo que hace que las migas de la taberna Cuatro Esquinas sean tan especiales es la manera en que se preparan y los ingredientes que se utilizan. Aunque las migas tradicionales se hacen principalmente con pan, en esta taberna se han innovado y se han añadido ingredientes inusuales, creando una fusión de sabores que sorprenderá a los paladares más exigentes.
Entre los ingredientes que se pueden encontrar en las famosas migas de Cuatro Esquinas se destacan el melón, las sardinas y el chocolate. Estos ingredientes aportan un toque fresco, salado y dulce respectivamente, que combina a la perfección con la textura crujiente del pan.
Elaboración cuidadosa y paciente
Para conseguir que las migas de la taberna Cuatro Esquinas tengan ese sabor y esa textura tan especial, es necesario llevar a cabo un proceso de elaboración minucioso que requiere paciencia y habilidad culinaria.
El pan se desmiga cuidadosamente y se tuesta lentamente en una sartén con aceite de oliva, hasta obtener ese característico color dorado. A continuación, se añaden los ingredientes complementarios, como el melón, las sardinas o el chocolate, según la elección del cliente. Es importante mezclar todos los ingredientes con suavidad, para que se integren perfectamente y se potencien los sabores.
La taberna Cuatro Esquinas se enorgullece de mantener viva la tradición de las migas, pero también de agregar un toque de innovación que las hace únicas. Cada plato se prepara con amor y dedicación, asegurando que cada bocado sea una experiencia culinaria inolvidable.
Si estás buscando probar una versión renovada de las migas tradicionales, no puedes dejar de visitar la taberna Cuatro Esquinas. Te aseguramos que te sorprenderás gratamente con la combinación de sabores y la pasión que se percibe en cada plato.